De regreso en La Paloma me encuentro otra vez con mi familia, mis amigos y el instituto.
El invierno terminó pero aún los días no son de verano. Las ballenas están de visita en la playa. El olor del Atlántico es incomparable. Un poco más frío que el Pacífico mexicano pero con la intensidad de los mares del sur. Ya comenzaron las clases con los estudiantes extranjeros que han decidido pasar un tiempo en Uruguay. A muchas personas les atrae la idea de perderse en este rincón de América del Sur y perderse en los diferentes atractivos que cada uno encuentra. El verano está cerca…